El acceso personalizado a la información acerca de su enfermedad por parte del paciente es una asignatura a mejorar en el entorno de Farma y Salud. La tecnología ha proporcionado un nuevo plano de comunicación, el vídeo online, que presenta una increíble capacidad de adaptación a estas necesidades informativas, con un sinfín de posibilidades para la mejora de su calidad de vida.
El mundo de la Salud/Farma ha experimentado una verdadera revolución tecnológica en los últimos tiempos. Este sector ha tomado un auténtico papel de pionero en muchas de sus disciplinas de comunicación, haciendo cotidiano que abundante información, protocolos… en definitiva, cualquier tipo de material, esté disponible a través de aplicaciones y en nuestros dispositivos, que se han convertido en unos instrumentos clave para ahorrar tiempo y costes, modernizando la profesión a pasos agigantados.
Pero, como en toda revolución, quedan detalles por pulir dignos de una ‘urgente intervención’. En este proceso de crecimiento del conocimiento hemos hecho que tanto médicos como pacientes sean más y más dependientes de estas nuevas herramientas tecnológicas. En este punto, quizás nos hemos centrado excesivamente en la instrumentalización y nos hemos olvidado de humanizar este entorno digital. Planteamos una necesidad de mejorar estos nuevos cauces de comunicación para que el enfermo y los especialistas sientan una mayor cercanía y, por qué no, afinidad emocional a los contenidos de estas potentes herramientas.
Una vez detectada la urgencia de humanizar esta tecnología, nos hemos focalizado en una herramienta que viene revolucionando la Red desde hace ya casi diez años: el vídeo online.
Y, ¿de qué manera podemos explotar las plataformas de contenidos en vídeo en beneficio de una comunicación tan importante como la relacionada con los sectores de Salud y Farmacia? Aquí os dejamos una buena batería de propuestas creativas:
1. Producción de videotutoriales, presentados por profesionales, con un contenido informativo especializado en medicamentos, solucionando todas las dudas acerca de sus componentes, posibles efectos adversos, posología etc.
2. Vídeos demostrativos acerca de ejercicios, a modo de servicio de coaching virtual, para tratar problemas específicos. Ejemplos como personas obesas, pacientes ancianos o enfermos con algún problema de salud severo, son solo algunos de los ideales receptores de este tipo de información, ajustada a las necesidades para mejorar su calidad de vida.
3. Series de apoyo psicológico a pacientes y familiares. Ejemplos como grupos de padres de niños con Hiperactividad o Déficit de Atención, o padres de niños con diabetes tipo 1, suponen un buen campo de acción en el que los vídeos pueden suponer un apoyo fundamental, constante e imprescindible para afrontar las dificultades del día a día de estas familias.
4. Farmacocinética para ‘dummies’. Muchos pacientes, sobre todo los ancianos, se niegan a tomar un medicamento que necesitan a diario porque desconfían sobre el efecto en su organismo o porque no lo entienden. Lo mismo ocurre con operaciones más o menos necesarias que en muchos casos les provoca rechazo o temor. Si hubiera vídeos con el material específico y contado en positivo, servirían de apoyo perfecto para los profesionales de la salud y sobre todo para conseguir el cumplimiento terapéutico, haciendo posible que el paciente siga exactamente el tratamiento como le han recomendado. Esta meta, muy difícil de cumplir, es clave para prevenir complicaciones y ahorrar mucho dinero a la Seguridad Social.
5. Videotutoriales de maquillaje e imagen personal para pacientes crónicos con mucho desgaste físico (cáncer, VIH…). Hablamos de un aspecto importantísimo para el bienestar del paciente y para su equilibrio emocional.
6. Terapia conjunta mediante streaming. Esta posibilidad tecnológica encontraría un buen campo de aplicación en la celebración virtual de sesiones par pacientes con enfermedades raras.
7. Vídeos informativos y prácticos acerca de los Protocolos de Primeros auxilios en pacientes con necesidades especiales: asmáticos, diabéticos, bebés…
8. Cocina/videorecetas para necesidades especiales. Recetas sin gluten para celíacos, elaboración de platos y menús para intolerantes a algún alimento, alimentos a consumir durante el embarazo, etc… Y todo ello ofrecido con abundante información contando por qué es beneficioso para el organismo.
9. Coach psicológico para familiares en momentos delicados, ofreciendo contenidos clave y útiles sobre cómo sobrellevar la hospitalización de un niño o ser positivo con un paciente crónico.
10. Vídeos formativos para pacientes. Se está hablando mucho del paciente empoderado, que mira mucho en Google y viene “resabiado” a la consulta. En este punto apostar por opciones como hacer una especie de wikisalud en vídeo para enseñar a pacientes qué es un excipiente, por qué hay diferentes fases en un medicamento, qué significa esa palabra que no entiende de su análisis clínico…
11. Uso del videoblogging como plataforma de información testimonial para pacientes. La creación de blogs basados en contenidos audiovisuales en los que el autor del blog relata sus experiencias con la enfermedad, o sus conocimientos sobre la misma, ofrece una comunicación empática que permite crear un ambiente de cercanía y compromiso con los pacientes.
12. Videos de influencers, expertos … en definitiva, persona conocidas de diversos ámbitos (según la patología y el tipo de paciente mayoritario en la misma) que hablan sobre la enfermedad, transmitiendo sus ánimos y deseos de mejoría a los pacientes y mostrando un compromiso con este colectivo. La difusión a través de Twitter, en cuentas creadas por los laboratorios, permitiría aportar visibilidad y llegar a todos los pacientes potenciales posibles.
13. Vídeos de casos de éxito/superación sobre personas afectadas por una patología: pacientes que han superado ciertos aspectos de la enfermedad o conseguido optimizar su vida con la patología cuentan su experiencia a través de una plataforma (preferiblemente videoblogging, pero también Twitter) para demostrar al resto de afectados por la patología que es posible llevar una vida normal en sus circunstancias.
En definitiva, el paciente merece una mayor atención informativa y una mayor personalización en la comunicación desde los entornos de Farma y Salud. Sin embargo, la tecnología –ya imprescindible- y la potencia de herramientas como el vídeo online no deben cegarnos en la búsqueda de nuestro objetivo: ofrecer la mejor información de manera adaptada a cada enfermo y sus circunstancias.