La salud bucodental constituye un pilar fundamental para el bienestar general y la calidad de vida de las personas. Durante el periodo de embarazo, mantener una óptima salud bucal adquiere una relevancia aún mayor, trascendiendo la salud de la madre para impactar significativamente en el desarrollo y bienestar del bebé. Diversas investigaciones han establecido vínculos entre una deficiente salud bucodental materna y resultados adversos en el embarazo, lo que subraya la necesidad de integrar el cuidado bucal como un componente esencial de la atención prenatal.

Durante el embarazo
1.Problemas dentales comunes durante la gestación: gingivitis, periodontitis, caries y otras afecciones
El embarazo se caracteriza por significativas fluctuaciones hormonales, especialmente un aumento en los niveles de estrógeno y progesterona. Estas alteraciones hormonales pueden incrementar el flujo sanguíneo hacia las encías, lo que las vuelve más sensibles e inflamadas. Esta mayor sensibilidad, combinada con una respuesta exagerada a la placa bacteriana, puede exacerbar la gingivitis. La progesterona, en particular, puede favorecer el crecimiento de ciertas bacterias anaeróbicas que se asocian con la enfermedad periodontal, una afección más grave de las encías.
En algunas mujeres embarazadas, se puede observar un crecimiento excesivo del tejido gingival, formando tumores benignos conocidos como granulomas piógenos o tumores del embarazo, cuya aparición se vincula a las fluctuaciones hormonales y a la presencia de irritantes locales.
Además, la composición y el flujo salival también pueden verse alterados durante el embarazo, pudiendo producirse una disminución en la producción de saliva (xerostomía o boca seca), lo que incrementa el riesgo de caries debido a la pérdida del efecto protector de la saliva.
Las náuseas y los vómitos, especialmente frecuentes en el primer trimestre, exponen los dientes a los ácidos estomacales, lo que puede erosionar el esmalte dental y aumentar la susceptibilidad a las caries. Finalmente, los cambios en los hábitos alimenticios, con antojos frecuentes de alimentos azucarados, también contribuyen a un mayor riesgo de desarrollar caries.
2. La esencial higiene bucodental en el embarazo: prácticas diarias y consejos importantes
Mantener una rutina de higiene bucodental rigurosa es fundamental durante el embarazo para contrarrestar el mayor riesgo de problemas dentales. Se recomienda cepillarse los dientes al menos dos veces al día durante dos minutos con pasta dental fluorada, idealmente después de cada comida y antes de acostarse. Es preferible utilizar un cepillo de dientes de cerdas suaves para evitar la irritación de las encías. El uso de hilo dental diariamente es esencial para limpiar entre los dientes, donde el cepillo no alcanza. Se puede considerar el uso de un enjuague bucal con flúor y/o propiedades antimicrobianas, optando por opciones sin alcohol.
Es recomendable utilizar productos que protejan las encías delicadas, prevengan la caries y controlen el biofilm. Fórmulas enriquecidas con ingredientes activos específicos para combatir los patógenos precursores de la gingivitis, así como sabores, texturas de baja abrasividad que no dañen las encías y ausencia de alcohol.
Además de las rutinas de higiene bucodental, se aconseja a las embarazadas mantener una dieta saludable y equilibrada, limitando el consumo de alimentos y bebidas azucaradas y beber abundante agua, especialmente entre comidas.
Durante el embarazo, es conveniente acudir al odontólogo con el fin de que éste realice una exploración y ofrezca a la embarazada las recomendaciones más oportunas. El segundo trimestre se considera el momento más seguro para realizar trabajos dentales de rutina.
Los tratamientos dentales necesarios, incluyendo radiografías y anestesia local, se consideran seguros en la mayoría de los casos, especialmente durante el segundo trimestre. Sin embargo, es fundamental informar al dentista sobre el embarazo y seguir sus recomendaciones específicas.
3. El personal sanitario es una ayuda indispensable para promover una buena salud oral en la embarazada
La salud bucal de la madre puede influir en la salud del embarazo. Durante la última década, numerosos estudios han demostrado que la enfermedad periodontal puede estar relacionada con complicaciones del embarazo, como parto prematuro.
También conocemos que los bebés nacidos de madres con pobre salud oral y altos niveles de bacterias cariogénicas en saliva están en alto riesgo de padecer caries. La caries continúa siendo la enfermedad infantil más prevalente, y ello, a pesar de ser prevenible.
Esto convierte al periodo prenatal en una etapa única para educar a la mujer embarazada en salud oral, así como para proporcionarle los cuidados dentales oportunos.
A pesar de dichas evidencias científicas, aún hoy en España, solamente una minoría de mujeres acude a su dentista durante el embarazo para recibir consejos y otros cuidados que le serán de gran ayuda. Se estima que solo el 15% de las mujeres embarazadas consultan a su dentista. La principal razón para no hacerlo es la falta de educación sanitaria y pensar que recibir esos cuidados puede poner en riesgo la salud del feto.
Es urgente que los profesionales relacionados con el embarazo aseguren a la mujer que los cuidados dentales no solamente son seguros, sino que son fundamentales para su propia salud y para el normal desarrollo del feto.
Las matronas, los farmacéuticos, los médicos de familia, los ginecólogos y el personal de enfermería, son una ayuda indispensable para promover una buena salud oral en la embarazada. Sus recomendaciones sobre higiene oral diaria, con soluciones expertas específicas de encías delicadas y, sobre todo, sobre la recomendada visita al odontólogo pueden prevenir enfermedades a madre y bebé, así como evitar posibles complicaciones a término del embarazo.
En conclusión, la salud bucodental durante el embarazo es un aspecto crucial que requiere una atención especial debido a los significativos cambios hormonales que experimenta la mujer. Estos cambios aumentan la susceptibilidad a problemas dentales comunes como la gingivitis gestacional, la periodontitis y el aumento de caries. Ello hace que mantener una higiene bucodental rigurosa, que incluya el cepillado diario con dentífrico fluorado y enjuagues bucales a base de ingredientes especializados en encías delicadas, es esencial para mitigar estos riesgos.