AirBiometrics desarrolla una tecnología no invasiva para la medición de biomarcadores proinflamatorios en saliva, orientada al seguimiento de enfermedades inflamatorias crónicas como la enfermedad inflamatoria intestinal (EII), la artritis reumatoide y la psoriasis. Aunque inicialmente el proyecto exploró el análisis de aire exhalado, el equipo pronto pivotó hacia la saliva como muestra biológica principal, debido a su mayor viabilidad técnica y operativa.
El dispositivo de AirBiometrics busca revolucionar el seguimiento de estas patologías con una solución point-of-care que permite medir niveles de inflamación en apenas 20 minutos a partir de una muestra de saliva. Esta innovación representa una alternativa más sencilla y accesible frente al análisis de calprotectina en heces, actual gold standard para el control de estas enfermedades, pero que presenta dificultades logísticas y de aceptación por parte del paciente.
En una primera etapa, la compañía se dirige a hospitales y consultas médicas para facilitar el seguimiento clínico en tiempo real, pero su ambición es llevar la tecnología al hogar mediante un modelo de self-testing. “Queremos que el paciente pueda hacer un seguimiento rutinario, barato, sencillo y desde casa”, explica Enrique Vicedo, CEO y cofundador de AirBiometrics. El objetivo es que los pacientes puedan monitorizarse de forma frecuente, asequible y con resultados clínicamente útiles.
AirBiometrics ya ha validado su propuesta con más de 250 pacientes en enfermedad inflamatoria intestinal y más de 100 en artritis y psoriasis, alcanzando una N significativa para pruebas de concepto. El biosensor que están desarrollando se basa en tecnología electroquímica y busca integrar al menos dos biomarcadores (calprotectina e interleucinas) para mejorar la especificidad y sensibilidad del resultado.
La compañía estima que el mercado potencial supera los 10 millones de pacientes diagnosticados en Europa y Estados Unidos, con una tendencia creciente en países en vías de desarrollo. Su modelo de negocio contempla la fabricación del dispositivo y la comercialización de consumibles de bajo coste (entre 6 y 9 euros), lo que podría multiplicar por 6 o por 12 la frecuencia actual de seguimiento de los pacientes.
A nivel estratégico, AirBiometrics no prevé liderar directamente la comercialización de sus soluciones, sino licenciar su tecnología a grandes actores con acceso al mercado, tanto para usos clínicos como para ensayos farmacéuticos. Ya han mantenido conversaciones con compañías interesadas en aplicar su solución al desarrollo de fármacos biológicos, y no descartan alianzas con fabricantes de dispositivos de laboratorio para ampliar su alcance.
La compañía fue fundada en 2020 por Enrique Vicedo, Dulce Martí y otros socios provenientes de sectores diversos, pero con experiencia en estrategia empresarial, investigación médica y desarrollo de producto. Actualmente, AirBiometrics cuenta con un consejo asesor multidisciplinar con experiencia en diagnóstico clínico, práctica médica y desarrollo corporativo. Gracias a su enfoque colaborativo, el equipo ha podido sortear varios pivotes tecnológicos y avanzar con una hoja de ruta clara.
Hasta la fecha, se han financiado mediante aportaciones propias, una ronda de 200.000 euros con inversores particulares y subvenciones públicas. Su próximo objetivo es validar clínicamente los dos biomarcadores principales con su biosensor, iniciar el desarrollo del potenciostato personalizado y alcanzar la fase de ensayo clínico en 2027, con la mirada puesta en la obtención del marcado CE y, más adelante, la aprobación de la FDA.
Artículo redactado por Daniel Galvis Andreu, cofundador en Simbionte y colaborador en BioEmprendedores.
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