Tuteur Bolivia incorpora Elopag a su portfolio de hematología
La apertura del evento estuvo a cargo de Nely Corzo, Gerente General de Tuteur Bolivia y Antonio Avila Nieves Director Comercial de Tuteur Latam. Con la presencia de destacados...
La estadounidense considera la oferta demasiado baja.
Cuando en 1981 un empleado de Monsanto llamado Robert Fraley logró traspasar un gen de una bacteria a la soja y a la petunia, nadie podía imaginar que los cultivos modificados genéticamente iban a ocupar, tres décadas y media más tarde, una superficie de 181,5 millones de hectáreas, o sea, más de tres veces la Península Ibérica. Ni que gigantes industriales de la talla y la solera de la multinacional química y farmacéutica alemana Bayer iban literalmente a apostar su futuro por entrar en ese sector.
Pero así ha sido. Bayer ha puesto sobre la mesa 55.300 millones de euros (62.000 millones de dólares) por Monsanto. En metálico, no en acciones. Y Monsanto ha dicho no. El consejo de la empresa estadounidense quiere más. Y no le faltan motivos. Bayer ofrece una prima del 37% por Monsanto. Dado cómo está el sector, para que los inversores digan sí, ese porcentaje deberá subir, como poco, al 50%.
La cuestión es ¿va Bayer a subir su apuesta? Es difícil saberlo. A favor del sí está que la empresa germana ha dado a entender que no va a dejar pasar esta oportunidad, y que Bayer ya tiene un claro historial de compras caras, como dejó claro en 2014 con la adquisición de la división de fármacos sin receta de la estadounidense Merck por 12.650 millones de euros (14.200 millones de dólares) y de la también germana Schering por 14.600 millones de euros.
En contra de la operación: precisamente ese historial de compras exorbitantemente caras, que ha llevado la deuda de Bayer de 7.000 millones de euros en 2011 a 17.450 millones en apenas cinco años. Con el precio ofrecido por Monsanto, esa deuda iba a dispararse hasta los 59.000 millones de euros. Y, encima, Bayer iba a diluir el precio de la acción, puesto que esperaba financiar 13.800 millones con la emisión de nuevos títulos. Ésas no son cosas que gustan a los inversores.
Por ahora, la pelota vuelve al tejado de Bayer. El consejo de la empresa de Missouri -donde está Monsanto- está dispuesto a considerar la oferta, siempre y cuando la de Leverkusen -es decir, Bayer- pague más. En juego está la creación de la mayor empresa de transgénicos y de pesticidas del mundo.
Fuente: El Mundo
La apertura del evento estuvo a cargo de Nely Corzo, Gerente General de Tuteur Bolivia y Antonio Avila Nieves Director Comercial de Tuteur Latam. Con la presencia de destacados...
La compañía biofarmacéutica vizcaína, que prevé lanzar su primer medicamento biológico al mercado en el primer semestre de 2025, destinará los fondos a ampliar su capacidad de producción y...
Una vez finalizada, esta adquisición ampliará la creciente capacidad de Lilly en Estados Unidos para producir medicinas innovadoras y así cambiar más vidas. Eli Lilly y Nexus...
La compañía crea esta nueva posición en línea con su compromiso por la sostenibilidad y cuidado del medioambiente y de las personas tanto de dentro como de fuera de la organización. Enseñat...